Aunque la mayoría de tiendas pequeñas aún no se instala en el mall de 40.000 m2 de Open Plaza, ayer empezaron a atender al público Saga Fallabella, Sodimac y Tottus, encontrando una respuesta inmediata en el nivel de ventas, por coincidir con la temporada navideña y el pago de gratificaciones.
Open abrió, pero no al 100%. El Cinemark lucía cerrado, con sus dos escaleras eléctricas inmóviles, igual el patio de comidas que posiblemente inicie sus actividades la próxima semana. En el resto del mall, la mayoría de sus tiendas lo irá haciendo en las próximas semanas o meses. Pero siempre hay algo nuevo. El martes por la mañana durante la conferencia de prensa en que se anunció la inauguración, en la avenida Cáceres no funcionaban los 25 semáforos inteligentes, financiados por Open Plaza. Por la noche, cuando llegó el Presidente de la República y dos de sus ministros a la inauguración, ya estaban encendidos regulando el intenso tráfico de la avenida Cáceres. A diferencia de los prolongados plazos de ejecución de obras públicas, la pista de 250 metros de doble vía, embellecida con jardines y berma central, que da hacia una de las puertas de Sodimac, está a punto de terminar a sólo cuatro días de haberse iniciado. Hasta ayer por la mañana, a la playa de estacionamiento para 400 unidades, sólo ingresaban vehículos de cuatro ruedas. Por la tarde ya lo hacían motociclistas que podían estacionar sus unidades, después de registrarlas en el ingreso.
“Sí, al principio no los estaban dejando pasar. No vendrán en cuatro ruedas, pero son clientes fabulosos nuestros. Yo he estudiado en Piura, y sé de la gran cantidad de piuranos que se moviliza en motocicleta, por eso pedimos a Open que se permita el ingreso”, dijo la gerente de Tottus, Diana Balarezo. Precisó que desde las 9:15 a.m. en que fue “lanzada” la tienda ayer, hasta las 3:30 p.m. Tottus habían recibido la visita de unas mil 800 personas, pero el mayor aforo iba a llegar desde la 6:00 p.m., cuando la gente salga del trabajo y “se vaya pasando la voz”, dijo la gerente de la tienda Diana Balarezo.
Las muñecas grandes Wispy Walte y los panetones y helados Tottus fueron los más comprados en las primeras horas de la mañana, en que los carros de la juguetería salían llenos. Todas las áreas, abarrotes, comidas preparadas, fiambres, amplia isla de pescado, carnes, pastelería, cumplieron las expectativas para una apertura agradable, dijo la ejecutiva.
Seguridad extrema
Una importante cantidad de agentes de seguridad de la empresa Secutity Xtrema, fueron desplegados ayer en el frontis del centro comercial para orientar al público en el ingreso. En el interior la seguridad estuvo a cargo de la empresa Omega, compuesta por efectivos con traje civil, además del propio personal de seguridad de Open Plaza. A su vez cada tienda contaba con su propia seguridad.
Sodimac
Los productos de verano y la playa, parillas, lámparas, muebles de playa y terrazas, etc., fueron los más pedidos en Sodimac que abrió desde las 8:00 a.m. y a decir de su gerente Cristhia Arteta Alva, tuvo una afluencia como si se tratara de un día domingo o feriado, habiendo recibido unas 3 mil visitas en las primeras ocho horas de atención. Calculó que el ingreso de clientes aumente cuando empiece a funcionar la sección de patio constructor que ayer aún no fue abierto.
“La idea es mantener los precios reales del mercado y la mejor atención”, señaló.
LO QUE FALTA
* Que abra la mayoría de tiendas hasta completar las ochenta construidas. A algunas sólo les queda instalarse, mientras otras aún están el la etapa de acabados.
* El sembrado de árboles.
* El pintado del cerco perimétrico.
* La pista doble vía que llega a la puerta de Sodimac.